Los mercados internacionales compraron 137 millones de litros de vino desde enero hasta agosto, mostrando un incremento del 6,8%. Las ventas de mosto se duplicaron.
El último informe del Instituto Nacional de Vitivinicultura sobre las exportaciones dio cuenta de un incremento del 6,8% en los primeros ocho meses del año, es decir, de enero a agosto en relación con el mismo periodo en el 2023.
Durante este tiempo, Argentina exportó 137 millones de litros de vino, unos 8,7 millones de litros más con respecto al 2023. De ese total, 104,6 millones (es decir, el 76,4%) corresponden a vinos fraccionados y 32,4 millones (el 23,6%) son vinos a granel.
Los primeros se mantuvieron relativamente estables aumentando un 3,8%, pero los segundos sí manifestaron un interesante incremento del 17,5%, con un fuerte incremento en los vinos blancos, que ocupaban un lugar muy marginal en estos mercados y ahora representan el 10% de las ventas.
Cuando hablamos de ingresos de dólares por estas exportaciones, cabe decir que el país padeció en lo que va del año, porque la caída en los precios internacionales del vino argentino cortó el impulso que generó el aumento en los volúmenes.
El precio promedio del vino total en el acumulado enero-agosto es de 3,46 dólares por cada litro, lo que representa una caída del 2,2%. En concreto, se vendieron poco más que 473 millones de dólares, lo que representa un aumento de apenas el 4.4%, cuando el incremento del volumen fue mayor.
Si hablamos solo de fraccionados, el peso promedio es de 4,21 dólares por litro. El vino a granel se vendió a prácticamente un dólar por litro. Ambos precios se mantuvieron relativamente estables.
Gran rendimiento del mosto
En contraposición con el vino a granel o fraccionado, las exportaciones de mosto concentrado en todo el año ascendieron considerablemente a 48.636 toneladas, lo que representa un incremento del 110,8% en volumen (más que el doble) y un 82,8% más de ingreso de divisas, en los mismos periodos analizados.
Sin embargo, el precio promedio del mosto concentrado en el acumulado del año también cayó de manera significativa de 1.637,7 dólares por tonelada a 1.572,2 dólares por tonelada. Es decir, un 13%.